La noche del miércoles y madrugada del jueves fue el arranque de las medidas de ahorro energético decretado por el Gobierno Nacional. Pero aparentemente para muchos panameños, cuando hay ganas, no hay ahorro energético que valga.
En un recorrido anoche por varios prostíbulos y Push Buttons en la ciudad capital, Crítica verificó cuales cumplieron con el mandato de apagar los letreros luminosos y cerrar en las noches.
En el área de El Dorado, los prostíbulos Golden Time, Gold Fingers y Miami estaban cerrados y sus letreros apagados.
La Mayor, en San Felipe, también cumplió con la orden gubernamental, al igual que Punto Marino (antiguo Acropol) en el área de la avenida peatonal.
Elite en la calle 50 tenía todos sus letreros apagados, pero estaba en operación. El Capri (antiguo Fénix) en Río Abajo no solo estaba abierto y con sus letreros encendidos. También estaba lleno.
De la convergencia de "push" en la Vía Transístmica compuesta por El Puente, Las Flores, Paris y Puerta del Sol, solo el último estaba cerrado. El resto estaban operativos y con iluminación parcial.
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